Foto: Clarin.com Bhateri Devi y Deva Singh llevan 44 años de casados y tres intentos fallidos de inseminación. Los óvulos de ella ya no servían así que, como última posibilidad, utilizaron los de una mujer más joven y los fertilizaron con el semen de su esposo. Más allá de ser un caso excepcional para la reproducción asistida y una luz de esperanza para muchas personas imposibilitadas de reproducirse en condiciones naturales, cabe preguntarse: ¿No estaremos ante un hecho mezquino? ¿No hay miles de niños en condiciones de adoptabilidad? ¿Es prudente traer niños al mundo en estas condiciones? Seguimos improvisando sobre la vida de otros sin darnos cuenta que tarde o temprano se nos caerá encima toda esta estructura carente de moral. No se trata de condenar a Bhateri Devi y Deva Singh por este hecho, sino de preguntarnos como sociedad hacia adonde vamos y tratar de cambiar el rumbo si es necesario.